BEIJING — China, pionera en la respuesta a la COVID-19, se está recuperando gradualmente del impacto de la epidemia y avanza con cautela en el camino de la reapertura económica a medida que la prevención y el control de la epidemia se han convertido en prácticas habituales.

Con los últimos indicadores económicos que apuntan a una mejora general en la macroeconomía, la segunda economía más grande del mundo está mirando más allá de un equilibrio entre reiniciar la economía y contener el virus.

Liderando a la nación hacia la construcción de una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos, Xi, también secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China y presidente de la Comisión Militar Central, ha trazado el rumbo hacia una transformación de alta calidad y un desarrollo más sostenible.

LA SALUD DE LAS PERSONAS PRIMERO

“Las empresas no deben relajarse y deben seguir implementando estrictamente medidas de prevención y control de epidemias para impulsar la reanudación del trabajo al tiempo que garantizan la seguridad y la salud de sus trabajadores”, dijo.

Xi, quien siempre antepone la salud de las personas para impulsar la reanudación del trabajo y la producción.

“Nunca debemos permitir que nuestros logros previos en el control de la epidemia, ganados con tanto esfuerzo, sean en vano”, dijo Xi en la reunión.

CONVERTIR LOS RETOS EN OPORTUNIDADES

Al igual que otras economías del mundo, el brote de COVID-19 ha asestado un duro golpe a la economía interna y las actividades sociales de China.En el primer trimestre, el producto interno bruto de China se contrajo un 6,8 por ciento interanual.

Sin embargo, el país optó por enfrentar el inevitable choque y ver su desarrollo en una perspectiva integral, dialéctica y de largo plazo.

“Las crisis y las oportunidades siempre coexisten.Una vez superada, una crisis es una oportunidad”, dijo Xi al hablar con funcionarios locales de la provincia de Zhejiang, la potencia económica oriental de China, en abril.

Aunque la propagación cada vez más rápida de la COVID-19 en el extranjero ha interrumpido las actividades económicas y comerciales internacionales y ha traído nuevos desafíos al desarrollo económico de China, también ha brindado nuevas oportunidades para acelerar el desarrollo del país en ciencia y tecnología y promover la modernización industrial, dijo.

Los desafíos y las oportunidades llegaron de la mano.Durante la epidemia, la economía digital del país, que ya estaba en auge, adoptó un nuevo auge, ya que muchas personas tuvieron que quedarse en casa y expandir sus actividades en línea, lo que provocó el uso de nuevas tecnologías como 5G y computación en la nube.

Para aprovechar la oportunidad, se han realizado planes de inversión masivos para proyectos de "nueva infraestructura", como redes de información y centros de datos, que se espera respalden futuras mejoras industriales y fomenten nuevos motores de crecimiento.

Como reflejo de la tendencia, el índice de producción de servicios de transmisión de información, software y tecnología de la información aumentó un 5,2 por ciento interanual en abril, superando una caída del 4,5 por ciento del sector de servicios en general, según datos oficiales.

UN CAMINO VERDE

Bajo el liderazgo de Xi, China se ha resistido a la vieja forma de desarrollar la economía a costa del medio ambiente y busca dejar un legado verde para sus generaciones futuras, a pesar del impacto económico sin precedentes que trajo la epidemia.

“La conservación ecológica y la protección del medio ambiente son causas contemporáneas que beneficiarán a muchas generaciones venideras”, dijo Xi, al considerar las aguas lúcidas y las montañas exuberantes como activos invaluables.

Detrás del camino firme de desarrollo verde de China está la búsqueda de los principales líderes de lograr una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos y la previsión de mantener un enfoque estratégico en mejorar el entorno ecológico a largo plazo.

Se debe hacer más para acelerar la innovación institucional y fortalecer la implementación de instituciones para ayudar a formar una forma ecológica de producción y vida, enfatizó Xi.